Sacar el máximo valor a las inversiones en sistemas y tecnologías de la información requiere que las empresas dediquen tiempo y esfuerzo organizacional de aprendizaje e innovación. Esta es una de las conclusiones de "The Long Conversation", una obra escrita por el profesor de Deusto Business School, Oswaldo Lorenzo, junto a Peter Kawalek, profesor de Manchester Business School, Gastón González, director de Expertia Consulting Group, y Ben Ramdami, profesor en Bristol Business School. A través de sus páginas, The Long Conversation ofrece a los empresarios las principales claves para materializar y maximizar el valor de la tecnología de la que ya disponen.
Los autores del libro, elaborado después de desarrollar una investigación a lo largo de los últimos diez años, consideran que durante los últimos tiempos las empresas han implantado sistemas y tecnologías empresariales de información que cubren de manera transversal a todos los procesos y funciones del negocio. Las expectativas han sido muy altas con objetivos de reducción de costes, mejora de las relaciones con clientes/proveedores, y mejores decisiones, entre otras. Oswaldo Lorenzo opina que, “a pesar de las buenas intenciones, muchas empresas siguen aún batallando para alcanzar los resultados esperados y poder sacar mayor provecho a las inversiones en tecnología”.
Pero, ¿por qué es tan difícil sacar todo el potencial de una tecnología? ¿Qué pueden hacer las empresas para extraer todo el valor que puede dar una tecnología? Estas son algunas de las preguntas a las que se da respuesta a lo largo del libro. En la situación económica actual, muchas personas podrían pensar que las empresas necesitan más y nueva tecnología de información, pero nosotros rechazamos esta afirmación y, por el contrario, sugerimos que las empresas lo que realmente necesitan es materializar el valor de la tecnología que ya tienen implantada.
Las empresas deben intensificar lo que los autores han denominado “The Long Conversation”. Es decir, las empresas necesitan nuevas prácticas organizacionales, nuevas capacidades y nuevas comunidades internas de aprendizaje que permitan soportar el diálogo y la conversación que genera un mayor valor de las inversiones en tecnología de información. “Sin duda, habrá nuevas tecnologías y será necesaria su implantación, pero ahora la prioridad debe ser el aprendizaje y la innovación desde la tecnología actual”, opina Lorenzo.
Deusto Business School es heredera de la tradición y experiencia de la Universidad de Deusto, la institución privada más antigua de España con 125 años de historia, en cuyas aulas se han formado más de 70.000 alumnos de una treintena de países, gran parte de los cuales integran hoy el Consejo de Administración de DBS y forman parte de los equipos directivos de las principales empresas del IBEX-35.
Bilbao, 14 de febrero de 2012.