Benito Gil Jiménez plasma en este libro la historia industrial de la ciudad de Albacete
En una noche de tormenta, las calles de una pequeña ciudad enclavada en la llanura manchega no sólo quedaría iluminadas por los rayos que acompañaban a una lluvia incensante. Sus ciudadanos asistirían sorprendidos a la inauguración del alumbrado eléctrico y todo cambiaría a partir de entonces. La electricidad provocaría, al igual que en el resto del país, profundos cambios económicos, sociales y, en general, en la mentalidad de las gentes de aquella época y modificaría incluso la fisonomía urbana de aquella ciudad de encuentros situada en plena meseta castellana.
Los testimonios de Azorín y José S. Serna, junto a los de obreros, empresarios, ingenieros, políticos, fotógrafos y ciudadanos en general, pretenden ilustrar parte de esta historia industrial en la llanura para no olvidad todos aquellos esfuerzos, logros o fracasos y poder reconocer un patrimonio industrial en Albacete casi a punto de desaparecer.